El cantante aprovechó su estadía en el país campeón del mundial de fútbol para jugar un partido amistoso horas antes de dar su concierto.
Bieber demostró que, a pesar de que este deporte no es muy popular en EE.UU., se maneja bastante bien con el balón y hasta metió un gol que celebró levantándose la polera.
El intérprete de “Baby” se puso la camiseta del Barcelona para la “pichanga” que jugaron en el Alcalá de Henares mientras que su amigo Ryan Butler vistió el uniforme del Real Madrid.
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