"¡Idiota!", "¡Payaso! ¡Pero qué payaso eres!". A su paso por Madrid, Justin Bieber no solo provocó los gritos de sus encolerizadas fans. Estos insultos procedían de los fotógrafos que no pudieron hacer su trabajo durante el 'photocall' anterior a la rueda de prensa del cantante porque éste decidió pasar rápido y sin pararse camino de la sala de prensa, donde despachó a los periodistas en apenas media hora.
Sin embargo, Bieber sigue haciendo amigos entre el gremio de fotógrafos. Esta vez ha sido en Israel, donde el joven cantante está de gira. Allí se subió a una 'scooter' para huir de los fotógrafos, que, según explicó en Twitter, no dejaban de seguirle. Pero el enfado de Bieber estuvo cerca de convertirse en algo peor, un delito. El joven enfiló su motocicleta hacia uno de los fotógrafos hasta casi arrollarle.
"Pensaréis que los paparazzi deberían tener algo de respeto en los lugares sagrados", explicó Bieber a través de la red social, según cuenta Gawker. "Yo solo quería caminar por donde lo hizo Jesús en Israel", añadió.
Pero, al parecer, Bieber quería caminar solo, sin fotógrafos alrededor ni fans que lo incomodasen. Por esa razón, según cuenta The New York Times , el joven ídolo de masas canceló un encuentro que tenía previsto con el primer ministro de Israel, Binyamin Netanyahu. Las razones que esgrimieron sus representantes fueron la negativa del cantante a que hubiera niños presentes en la entrevista con el político israelí.
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