Con ello el cantante resolverá los cargos de delito menor presentada contra uno de sus directivos y el ejecutivo de una discográfica después de los incidentes que se produjeron en un centro comercial de Nueva York.
El caso se produjo en un incidente en 2009, cuando miles de jóvenes rebeldes se presentaron en una tienda de ropa en Long Island para ver a Justin Bieber que acudió a un acto de firma de autografos.
Los ejecutivos fueron acusados después de que la policía dijo que se negaron a ayudar a dispersar a la multitud.
La fiscalía dijo a un juez el viernes que se retiran los cargos. La compañía discográfica y una sociedad de gestión habían sido declaradas culpables de incendio y otros delitos.
El fiscal de distrito del Condado de Nassau, Kathleen Rice, dijo que la participación de Bieber para educar a los niños tiene “un valor incalculable.”
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