Los incidentes que ha protagonizado Justin Bieber en los pasados meses, como escupir a unos fanáticos, presentarse desnudo frente a su abuela o intentar golpear a un paparazzi, lo han ido alejando de la imagen de niño inocente con que se dio a conocer en el mundo del entretenimiento hace cinco años.
Pero a pesar de esos comportamientos las peticiones que hizo el cantante para el concierto que presentará en el Coliseo de Puerto Rico José Miguel Agrelot, el 19 de octubre, recuerdan que simplemente es un chico de 19 años.
A diferencia de su colega Beyoncé, que se presentó en el mismo recinto hace unas semanas cuya lista fue larga y detallada, el cantante pidió lo indispensable en su camerino.
Entre las piezas de muebles que solicitó se encuentra un sofá, un "love seat" y tres mesas complementarias, sin especificación de color ni tamaño.
Lo que si se detalló fue el tamaño de una mesa de ping pong que utilizará Justin, que debe tener calidad y medidas de una profesional.
Las bebidas y comidas también son simples y rara vez hizo especificación de marcas.
Entre los alimentos en el camerino debe haber una bandeja de vegetales, otra de cortes fríos y quesos y otra de frutas. Además pidió un racimo de guineos, una caja de barras Nutri Grain de manzana y caramelo, dos cajas de Ritz Bits Peanut Butter sandwiches y otras dos de queso, manzanas cortadas y caramelo derretido para acompañarlas.
En cuestión de bebidas se limitó a pedir botellas de agua, otras de agua con vitaminas, refrescos de gustos como Cherry Coke y Dr Pepper, y té de varios sabores.
En el camerino también debe de haber un vaporizador de Vicks y jabón antibacterial.
El cantante canadiense llegará a la Isla con su gira "Believe", que comenzó el 29 de septiembre de 2012, en Glendale, Arizona.
La serie de conciertos da apoyo a su tercer disco, del mismo nombre, que salió el 15 de junio de 2012.
Esta es la primera vez que Justin se presentará en el País. De hecho, las entradas para el espectáculo se agotaron en cuestión de días.
