El ídolo pop de adolescentes Justin Bieber presentó este miércoles sus condolencias - a la vez que solicitó leyes más duras contra los paparazzi- luego de que un fotógrafo se matara en la carretera mientras trataba de lograr una foto del Ferrari del cantante.
La policía de Los Ángeles afirmó que la popular estrella de 18 años de origen canadiense no se encontraba en su auto deportivo de lujo cuando fue detenido por exceso de velocidad el día de Año Nuevo y el fotógrafo no indentificado que presenció el suceso estaba tomando fotos y fue atropellado por otro vehículo.
"Aunque no estuve presente ni directamente implicado en este trágico accidente, mis pensamientos y oraciones están con la familia de la víctima", afirmó Bieber en un comunicado publicado en varias páginas web de espectáculos estadounidenses.
"Con suerte esta tragedia inspirará una legislación y cualquier otro paso necesario para proteger las vidas y la seguridad de los famosos, los agentes de policía, el público inocente que pasaba por ahí y los fotógrafos mismos", añadió.
El fotógrafo de Los Ángeles Thibault Mauvilain informó a los reporteros que se encontraban allí que en el lugar de los hechos se hallaba un amigo fotógrafo llamado Chris, que no era "un paparazzo, sino solo otro chico de Nuevo México".
Bieber, que actuó en un concierto en Times Square en la última noche del año, cuenta con una larga lista de incidentes con los paparazzi. En mayo supuestamente golpeó a uno en un aparcamiento, pero no se presentaron cargos en su contra.